Durante todo el embarazo a los padres les surgen numerosas dudas y miedos de todo tipo. En el momento de dar a la luz, todo este estrés puede ocasionar que la madre sufra lo que se conoce como depresión postparto, que se traduce en un trastorno emocional derivado de la maternidad habitual y que puede ser de mayor o menor grado.

Según algunos estudios recientes, dar el pecho al recién nacido podría ser un método de prevención muy eficaz para evitar la depresión postparto. También, y en el caso que la madre ya la padezca, la lactancia conocida como natural, no solo ayudaría a paliar los efectos de la enfermedad, sino que protegería al bebé durante el transcurso de la misma.

Hormonas que curan

Una de las razones por las que la lactancia materna puede ayudar a curar y prevenir la depresión postparto es porque esta segrega una hormona que tiene un efecto neurotransmisor positivo. A esta hormona se la conoce como oxitocina, que proporciona estados de calma y placer, algo muy necesario i beneficioso durante todo el proceso postparto.

Síntomas de la depresión postparto

Los síntomas que indican que una madre sufre depresión son muy variadas y dependen sobretodo del carácter de la madre. La falta de sueño es un claro ejemplo de que algo va mal si se prolonga por más de dos días. También hay que prestar especial atención cuando se produce una considerable disminución del peso corporal, pero cuidado, no debe confundir-se en ningún caso con la perdida natural que tiene lugar con el puerperio.

La dificultad para levantarse de la cama y el abandono de todo el cuidado personal también indican que puede haber una depresión al acecho. Precisamente, todos estos síntomas que hemos dado a conocer en este artículo pueden ser evitados gracias a la hormona de la oxitocina, que recordemos, está presente en la leche materna.

Los falsos mitos acerca de dar el pecho

En ocasiones se ha dicho que el cansancio es una consecuencia de dar el pecho al bebé, esto no es cierto y así lo demuestran algunos estudios. En este caso, la fatiga y los problemas de sueño son causados por una leve depresión postparto. Todos estos estudios efectuados sobre pacientes, han llegado a la conclusión que una madre que amamanta a su hijo, se duerme mucho más rápido que una madre que no lo hace.

Con el dolor pasa exactamente lo mismo, siempre se ha dicho que dar la lactancia natural produce dolor de pecho, y en este caso, esto tiene mas que ver con un parto complicado o instrumentalizado que por la propia acción de dar el pecho.

Rechazo al bebé

Los cuadros más severos de depresión los encontramos en el momento en que la madre afirma que el bebé estaría mucho mejor sin ella. En este punto se produce un rechazo de la madre hacia el hijo, que por lo general desaparece con el tiempo. Ahora bien, mientras esto se produce, la angustia que recorre el interior de la madre puede dejar secuelas irreversibles, como la negativa a querer tener un segundo hijo pese a que en los planes de futuro existiera dicha posibilidad. En estos casos se requerirá de la ayuda de un especialista que dará pautas para llegar a buen puerto.

A quién preguntar

La educación en casa también es imprescindible. Por ello es necesario que durante todo el proceso del embarazo se requiera la opinión de especialistas. En ocasiones, las madres tienden a pedir opinión a otras madres sobre si amamantar al bebé o no hacerlo. En este caso, las opiniones son muy dispares y hemos de tener en cuenta que no hay dos madres exactamente iguales. Las opiniones que son realmente validas vienen por parte de los profesionales de la medicina, los psicólogos especializados y todas aquellas que se obtienen mediante la lectura de libros dedicados a dicho tema. Con la salud de la madre y del bebé, no se juega.

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